el-‘oso’-y-el-madrono:-curiosidades-y-secretos-del-emblema-de-madrid

El ‘oso’ y el madroño: curiosidades y secretos del emblema de Madrid

Hoy es el cumpleaños de uno de los iconos de Madrid, nuestra querida escultura del ‘Oso y el madroño’ de la Puerta del Sol, que tal día como hoy se instaba en el centro de Madrid para convertirse uno de los puntos más fotografiados y reconocibles de la capital. Una escultura que guarda numerosos secretos y curiosidades que vamos a repasar en este post.

-Comenzaremos por la más obvia, esta escultura se inauguró el 10 de enero de 1967, es decir que cumple 55 años. De hecho, se quería haber inaugurado a finales de 1966 pero una nevada retrasó el evento.


-Está hecha de bronce y pesa, pedestal incluido 20 toneladas. Su elevado peso hizo que no pocos se preocupasen sobre si podía dañar el suelo de la Puerta del Sol, ya de por sí bastante ‘agujereado’ por las infraestructuras del Metro.


-El autor de la obra fue el escultor Antonio Navarro que recibió este encargo por parte del Ayuntamiento de Madrid.


-El artista recibió, por este trabajo, 200.000 pesetas de la época.


-El origen de este emblema lo encontramos en el siglo XIII, a unas disputas entre la Villa de Madrid y la Iglesia por unas tierras. Después, de muchas negociaciones se llegó a un acuerdo  y se concluyó que la Villa se quedaría con los árboles y la Iglesia con los pastos, de ahí que se incluyera el madroño para acompañar al oso en el escudo heráldico.


-Para hacer esta obra e la ciudad el escultor utilizó como modelo a un oso de la Casa de Fieras del Retiro, que había sido capturado en Asturias y al que bautizó con el nombre de ‘Felipe’.


-Para ubicar esta obra se plantearon distintas ubicaciones como la Plaza Mayor o el propio Parque del Retiro. Finalmente se optó por instalarla en el corazón de la ciudad, la Puerta del Sol.


-Dentro de la propia Puerta del Sol, el monumento siempre ha ocupado la misma ubicación, excepto unos años (1986-2009) que se trasladó al inicio de la calle del Carmen.


-Para el final he querido dejar su “secreto” más llamativo y es que, según muchos estudiosos, no se trata de un osos sino de una osa. Por ejemplo López de Hoyos, en su Declaración de Armas apunta que la “la osa del Escudo de Madrid está fundamentada en las siete estrellas que conforman la constelación de la Osa Mayor”.Un hecho que parece no gustó a la Iglesia y con el paso de los años se fue olvidando el género original del animal para mutarlo en masculino.


Leer más
‘la-ultima-cena’-que-se-puede-ver-en-una-fachada-de-madrid

‘La última cena’ que se puede ver en una fachada de Madrid

‘La última cena’ es uno de los cuadros más famosos de la historia del arte. Obra del insigne Leonardo da Vinci, realizada aproximadamente entre los años 1495 y 1498 se encuentra, a día de hoy, en la misma pared en la que resultó pintado originalmente, en el convento de Santa María del Grazie, en Milán. Con unas medidas de 4,6 metros de largo por 88 cm de ancho, representa a Jesús con sus doce apóstoles. Es seguro que todos los tengáis en mente, lo que es probable que no tantos sepáis, es que en una fachada muy céntrica de Madrid se puede ver una réplica de este cuadro. Concretamente en una de las caras del Oratorio del Caballero de Gracia, con acceso doble, desde Gran Vía y desde la vía del mismo nombre, la calle del Caballero de Gracia.

Este templo, del que ya os hablé hace tiempo en este post, es uno de los principales secretos de la Gran Vía, una iglesia de bella factura, que vive totalmente ajena al jaleo que se revuelve detrás de sus gruesos muros. Sus orígenes, los del oratorio original, se remontan a mediados del siglo XVII. Más tarde se encargaría al arquitecto Juan de Villanueva, autor de grandes obras como el Museo del Prado o la reconstrucción de la Plaza Mayor, el levantar una nueva versión de este oratorio, trabajos que se llevarían a cabo desde 1782, fecha de la colocación de la primera piedra, hasta 1795.

No obstante, aunque el Oratorio del Caballero de Gracia se inauguró en este año, los trabajos y reformas no terminaron ahí. La fachada principal, que en contra de lo que pueda parecer, es la que da a la discreta calle del Caballero de Gracia, no se concluyó hasta 1828 ya bajo las órdenes de Custodio Moreno. Es precisamente en ella donde nos espera el detalle curioso de Madrid que nos ocupa en esta ocasión. Una réplica en piedra del cuadro de La última cena, realizada por José Tomás y que se ubica bajo el ventanal que da luz al coro.

Esta llamativa particularidad pasa muy desapercibida por localizarse en la fachada que da a la calle del Caballero de Gracia. De mirar al otro lado no sería un secreto de Madrid y a diario recibiría decenas de fotografías. ¿La conocías?

Leer más

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies